Esta resolución fue adoptada en el Sexto Congreso Nacional del Partido Socialista por la Igualdad (Reino Unido), celebrado del 22 al 25 de octubre de 2022. Lea el informe completo sobre el Congreso aquí.

1. En enero de 2023, la pandemia de COVID-19 entrará en su cuarto año. Oficialmente, más de 627 millones de personas se han infectado con COVID en todo el mundo y más de 6,5 millones han muerto. Sin medidas de mitigación, miles de millones de personas están siendo infectadas y reinfectadas con COVID sin ser contabilizadas. Según estimaciones confiables, alrededor de 21,5 millones han muerto por COVID a nivel internacional.

2. En Gran Bretaña, más de 207.000 personas han muerto a causa de la enfermedad y cientos siguen muriendo cada semana. Con el regreso a las escuelas y universidades provocando un aumento en los casos, los científicos predicen un brote en este invierno más grande que nunca, combinado con la gripe para producir una 'doble pandemia' que hundirá al Servicio Nacional de Salud (NHS) en una crisis más profunda. El 1 de junio de 2021, el BMJ (anteriormente British Medical Journal ) acusó al gobierno británico de haber desatado “una vorágine de daños evitables”, incluidas hasta 150.000 personas “que murieron antes de lo esperado” debido a su respuesta a la Pandemia de COVID-19. El editorial de la revista del 4 de febrero de 2021 escribió: “Como mínimo, el COVID-19 podría clasificarse como ‘asesinato social’”.

3. El asesinato social cometido por el gobierno de Johnson fue el resultado de una agenda eugenista ampliamente apoyada en los círculos gobernantes. La política de “inmunidad colectiva” o de rebaño (la infección masiva de la población con una enfermedad mortal) adoptada por el gobierno al comienzo de la pandemia estuvo vinculada a un resurgimiento y adopción del maltusianismo. Johnson había escrito previamente en apoyo de Thomas Malthus, un ideólogo capitalista de finales del siglo XVIII y principios del XIX que argumentaba que la “inevitabilidad” de la superpoblación hacía que la pobreza y la muerte prematura fueran necesarias para los pobres.

4. El principal asesor científico de Gran Bretaña, Sir Patrick Vallance, declaró que la inmunidad colectiva requería de la infección de 'alrededor del 60 por ciento' de los 66 millones de habitantes del Reino Unido (40 millones de personas). La estrategia de “inmunidad colectiva” fue propuesta por el gobierno contrario a numerosos estudios científicos que mostraban que la inmunidad a través de la infección masiva de la población de hecho no era posible, un hecho probado por la continuación de la pandemia que involucra mutaciones repetidas. La subvariante ómicron BA.5 ahora es dominante en todo el mundo, con tasas reales de transmisión cercanas o superiores a los picos históricos alcanzados el invierno pasado durante la oleada de ómicron BA.1. Varias mutaciones compiten por el dominio en Gran Bretaña, con el peligro de que futuras mutaciones puedan ser más infecciosas y mortales que sus predecesoras.

5. El Partido Socialista por la Igualdad (Reino Unido) (el PSI, o SEP por sus siglas en inglés) respalda la resolución del Congreso aprobada en agosto de 2022 por nuestro partido hermano en los Estados Unidos, “La pandemia de COVID-19 y la lucha por el socialismo”. Dice: “La trágica experiencia de los últimos dos años y medio ha demostrado que la lucha para poner fin a la pandemia depende y es inseparable de la lucha contra el capitalismo y por el socialismo. Esto requiere la construcción de un movimiento de masas de la clase obrera internacional, basado en la ciencia y una comprensión político-histórica de las fuerzas responsables de este crimen social masivo. El Partido Socialista por la Igualdad (EE.UU.) y sus partidos hermanos en el Comité Internacional de la Cuarta Internacional (CICI) deben continuar brindando liderazgo en esta lucha. Junto a la lucha contra la guerra imperialista, por la igualdad social y en defensa de los derechos democráticos, la lucha por la eliminación global es hoy uno de los componentes centrales de la lucha de clases en cada país”.

6. Gran Bretaña ha encabezado la política pandémica homicida de la clase capitalista a nivel mundial. Al denunciar los bloqueos e insistir en que la economía permanezca abierta para mantener las ganancias fluyendo hacia las corporaciones, el entonces primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, habló en nombre de la élite gobernante mundial con su arrebato crudo y sociópata en octubre de 2020, que no debe haber 'más mierda de confinamientos”. Anticipó el abandono total de todas las medidas de contención que el gobierno se vio obligado a implementar al comienzo de la pandemia debido a la indignación pública masiva. Resultó en aún más muertes en la segunda ola de la pandemia, 56.735 muertes, en comparación con 44.235 durante el mismo período durante la primera ola.

7. Las últimas medidas de mitigación que quedaban en Gran Bretaña se rompieron en los primeros meses de 2022. En enero, Johnson anunció en el parlamento que el uso de mascarillas en las escuelas secundarias de Inglaterra dejaría de usarse en las próximas 24 horas. En una carta del 19 de abril a los líderes de los servicios de salud, el NHS de Inglaterra declaró que estaba “adaptando la forma en que el NHS opera con el COVID-19 en circulación general y con la probabilidad de que el virus siga siendo endémico durante algún tiempo”. Después de declarar que la sociedad tenía que “aprender a vivir con el virus”, el gobierno proclamó el “Día de la Libertad” en julio de 2021. Esta ha sido la narrativa de la élite gobernante británica desde entonces, con Liz Truss y Rishi Sunak declarando durante la campaña de liderazgo conservador que las medidas de confinamiento para suprimir el COVID nunca deberían haberse introducido y nunca se volverían a imponer. “Vivir con el virus” significa morir a causa del virus.

Los resultados de tres años de infección masiva

8. La crisis de COVID se mide no solo en millones de muertes prevenibles, sino en los cientos de millones de personas que han sufrido síntomas duraderos. Los estudios muestran que aproximadamente el 10-30 por ciento de los pacientes con COVID-19 desarrollan COVID-19 prolongado, que puede afectar a casi todos los órganos del cuerpo. La infección está relacionada con un mayor riesgo de ataque cardíaco, accidente cerebrovascular, trastornos neurológicos, enfermedad renal, diabetes, desregulación inmunológica y otros efectos secundarios letales o que alteran la vida. Las posibilidades de desarrollar COVID persistente (prolongado) se agravan con cada reinfección y solo se reducen ligeramente con la vacunación. Es probable que haya más de 400 millones de personas en todo el mundo que padezcan COVID prolongado, para las cuales no existe un tratamiento viable.

9. La situación en Gran Bretaña, con una población de menos de 70 millones, es horrible. Según un estudio publicado en el BMJ en septiembre, “A mediados de 2022, aproximadamente el 70 por ciento de la población adulta del Reino Unido se había infectado con el SARS-CoV-2. De estos, casi 2 millones reportan síntomas de Covid-19 que persisten durante más de cuatro semanas; 807.000 (41por ciento de todas las personas con Covid prolongado durante más de un año; y 403.000 (19 por ciento) por más de dos años. Según los datos de la fuerza laboral de la Asociación Médica Británica, un médico general equivalente a tiempo completo con un tamaño de lista promedio (aproximadamente 2.000) tiene alrededor de 65 pacientes con Covid prolongado, 27 de los cuales habrán estado mal durante más de un año y 12 por más de dos años.”

10. Las políticas más brutales estaban reservadas para los discapacitados y los ancianos. Las 20.000 residencias de ancianos del Reino Unido, que albergan a más de 400.000 ancianos y personas vulnerables, se transformaron en campos de exterminio. Debido a la enorme presión ejercida sobre el Servicio Nacional de Salud por la pandemia, una directiva del NHS de Inglaterra del 17 de marzo de 2020 ordenó que 25.000 pacientes de edad avanzada deberían ser evacuados de las camas de hospital sin someterse a la prueba de COVID-19. Muchos fueron trasladados a residencias. Según los datos de la Oficina de Estadísticas Nacionales, en febrero de este año habían muerto 45.632 residentes de hogares de ancianos, con COVID incluido en sus certificados de defunción como causa de muerte, lo que representa el 16,7 por ciento de todas las muertes de residentes en hogares de ancianos. Durante la primera ola de la pandemia, se autorizaron ilegalmente y sin consentimiento cientos de órdenes de No Resucitar (DNR) en hogares de ancianos y para personas con discapacidad mental y física. 119 proveedores de atención social informaron que los avisos generales de DNR habían afectado a las personas bajo su cuidado.

11. Como resultado de la pandemia, la esperanza de vida en todo el mundo se ha reducido en 1,6 años, la primera disminución mundial desde el final de la Segunda Guerra Mundial. Los impactos combinados de la muerte masiva y el debilitamiento redujeron la esperanza de vida en el Reino Unido, según Public Health England, en 1,3 años para los hombres y 0,9 años para las mujeres. Este retroceso social, defendido durante mucho tiempo por un grupo significativo de eugenistas entre la élite gobernante de Gran Bretaña, se considera un bien positivo para reducir las obligaciones de pensiones y otros gastos de bienestar social. Estas consideraciones fueron resumidas por el columnista del Telegraph Jeremy Warner, quien escribió al comienzo de la pandemia: “Para no ser demasiado sutil, desde una perspectiva económica totalmente desinteresada, el Covid-19 podría incluso resultar levemente beneficioso a largo plazo al desproporcionadamente sacrificar a los ancianos dependientes”.

Un evento desencadenante en la historia mundial

12. El Partido Socialista por la Igualdad en Gran Bretaña observa con orgullo el historial del World Socialist Web Site y el CICI sobre la pandemia, que no tiene paralelo y es un triunfo del movimiento marxista. La resolución del Partido Socialista por la Igualdad en EE.UU. señala:

Desde enero de 2020, hemos publicado más de 5.000 artículos sobre la pandemia, alertando continuamente a la clase trabajadora internacional sobre la creciente catástrofe global y abogando por políticas para eliminar el COVID-19 a nivel mundial. Desde el principio, el CICI insistió en que la pandemia no era simplemente un problema médico, sino principalmente una crisis política, social y económica derivada de la crisis capitalista mundial más amplia. La respuesta a la pandemia estaría determinada por las condiciones sociales preexistentes. En EE.UU., décadas de guerra interminable, parasitismo financiero, desindustrialización, la degeneración corporativista de los sindicatos, la evisceración de los derechos democráticos y el cultivo de la política de extrema derecha encarnada en la presidencia de Donald Trump fueron las fuerzas determinantes en el inicio de 2020.

En marzo de 2020, el CICI caracterizó por primera vez la pandemia como un 'evento desencadenante' similar al asesinato del archiduque austríaco Francisco Fernando, que puso en marcha el estallido de la Primera Guerra Mundial y más tarde la Revolución Rusa. Al igual que con el magnicidio, la pandemia exacerbó profundamente la ya avanzada crisis del capitalismo mundial y aceleró los procesos que conducen tanto a la guerra como a la revolución. Dos años más tarde, con el estallido de la guerra de Estados Unidos y la OTAN contra Rusia y el crecimiento de las luchas cada vez más militantes de la clase obrera internacional, se ha disparado el gatillo.

13. La resolución del Congreso PSI (Reino Unido) de 2020 señaló la advertencia del editor europeo del Financial Times, Tony Barber, de que la pandemia funcionaría como el evento desencadenante de la revolución, como lo predijo el CICI.

Está en la naturaleza de los eventos cataclísmicos, como la pandemia, acelerar y remodelar desarrollos históricos que habrían ocurrido de todos modos. La primera guerra mundial intensificó la agitación en Rusia, lo que condujo a las revoluciones de 1917 e impulsó el surgimiento de EE.UU. como la principal potencia mundial del siglo XX... La pandemia y sus consecuencias económicas, a menos que se las controle, seguramente tienen consecuencias similares a gran escala.

El Partido Laborista y los sindicatos se unen al gobierno de Johnson en una coalición de facto

14. La resolución del Congreso PSI (Reino Unido) de octubre de 2020 documentó los primeros meses de la pandemia, durante los cuales el gobierno de Johnson organizó su rescate de 410 mil millones de libras esterlinas de los bancos y corporaciones y puso fin al primer cierre del 23 de marzo después de solo tres meses, en cumplimiento de una brutal campaña de regreso al trabajo para hacer que la clase obrera pague las enormes sumas entregadas a las corporaciones. Estos crímenes se llevaron a cabo con la connivencia del Partido Laborista y los sindicatos. La pandemia estalló cuando los laboristas aún estaban bajo el liderazgo de “izquierda” de Jeremy Corbyn. Éste se comprometió de inmediato a trabajar con Johnson, declarando en un debate parlamentario sobre la pandemia el 25 de marzo de 2020: “La tarea inmediata de la Oposición es apoyar los esfuerzos de salud pública que se están realizando, siendo al mismo tiempo constructivamente críticos cuando sea necesario para garantizar que hay una respuesta oficial mejorada”. Sir Keir Starmer, al convertirse en líder del partido en abril de 2020, solo profundizó la asociación “constructiva” de Corbyn con los tories proclamando: “Nuestra voluntad de unirnos así, como nación, ha estado inactiva durante demasiado tiempo”.

15. Los sindicatos han jugado un papel decisivo apoyando a los tories, aprovechando la emergencia del COVID para reforzar su connivencia corporativista con el gobierno y la patronal. El Congreso de Sindicatos (TUC, Tardes Union Congress) y sus sindicatos constituyentes cerraron todas las iniciativas de la clase trabajadora, incluidas las huelgas salvajes de los trabajadores postales por la seguridad del coronavirus y las huelgas oficiales de 50.000 profesores, conductores del metro de Londres y numerosas amenazas de huelga de los trabajadores ferroviarios y otros, mientras descartaban las demandas de cientos de miles de padres para el cierre de las escuelas.

16. Los sindicatos firmaron el gigantesco rescate del gobierno a las corporaciones y bancos, que fue formulado en numerosas reuniones. Estos incluyeron al entonces canciller Sunak organizando desde el Tesoro –incluso antes de que se implementara el primer cierre– una 'mesa redonda' de grupos empresariales y sindicatos el 19 de marzo de 2020 a la que asistió la secretaria general de TUC, Frances O'Grady, y la directora de la Confederación de la Industria Británica (CBI), Carolyn. Fairbairn. Una vez que se implementó el rescate y se reprimieron las huelgas, la coalición Conservador/Laborista/TUC de facto se movió rápidamente para organizar el final del primer cierre y obligar a millones de personas a regresar a lugares de trabajo inseguros. Tan pronto como el 3 de abril de 2020, solo 10 días después de que se implementara el primer cierre, el TUC emitió una declaración conjunta con el CBI y el Ejecutivo de Salud y Seguridad que insistía: “Las empresas que pueden permanecer abiertas de manera segura y apoyar los medios de subsistencia no deben verse obligadas a cerrar por malentendidos sobre la orientación del gobierno”.

17. El alcance de la colusión corporativa durante la pandemia no tenía precedentes. El sindicato de Trabajadores Ferroviarios, Marítimos y del Transporte (RMT) se unió al Foro Conjunto de Coronavirus de la Industria Ferroviaria del gobierno con el objetivo de garantizar “una estrecha cooperación y colaboración entre los sindicatos y los empleadores”. O'Grady publicó una carta abierta en el Times en la que proponía 'una gran oferta generosa al gobierno: danos un sitio en la mesa, una voz equitativa, escucha nuestras ideas... A cambio, nos arremangaremos y nos pondremos manos a la obra' de reconstruir nuestro país para que funcione para todos. Tal como lo hicimos después de la Segunda Guerra Mundial”. El gobierno respondió organizando siete “reuniones sector por sector” presididas por el secretario comercial Alok Sharma con líderes sindicales y empresariales, de las cuales el TUC elaboró un documento de política declarando que “no toma una posición sobre la ciencia de cómo para gestionar una pandemia o la velocidad o la naturaleza de cualquier regreso al trabajo”.

18. Los corbinistas jugaron un papel central en mantener toda la oposición a las políticas pandémicas del gobierno dentro de los canales seguros de la burocracia laboral y sindical. Su campaña mal llamada y ahora inactiva Cero-COVID UK existió únicamente para brindar una disculpa por la negativa de los laboristas y los sindicatos a hacer algo para evitar realmente que el virus se propague por los lugares de trabajo y las escuelas. La líder de los corbinistas, Diane Abbott, incluso declaró: 'Siempre ha sido el caso de que algunas personas que apoyan a nuestra organización no necesariamente creen en absolutamente en cero-COVID'. Esto permitió que Cero-COVID UK actuara como una plataforma para que numerosos laboristas y burócratas sindicales se presentaran como críticos preocupados de los conservadores, incluso cuando sabotearon activamente la oposición entre educadores y padres a la política compartida de los conservadores y laboristas.

19. El Partido Socialista por la Igualdad, junto con nuestros partidos hermanos a nivel internacional, luchó por el fin de la campaña criminal de regreso al trabajo y la reapertura de escuelas, el repudio de los rescates corporativos y el establecimiento de la propiedad de los trabajadores y el control democrático de las principales bancos y corporaciones. Insistimos en que los gobiernos proporcionen un ingreso digno a todos los afectados por la pandemia, para financiar medidas de contención y ampliar la atención médica y las protecciones sociales. Estas demandas se basaron, como señaló la resolución del Congreso PSI (UK), en la “premisa fundamental de que la respuesta a la pandemia debe estar determinada por lo que necesitan los trabajadores y la sociedad en su conjunto, no por lo que el sistema capitalista y los oligarcas financieros están preparados a dar.'

20. La respuesta criminal de la clase dominante a la pandemia se resumió en su política de mantener las escuelas abiertas casi continuamente durante la pandemia. Esto resultó en la muerte de 570 educadores y personal escolar y 211 niños. Para febrero de este año, más de 4,6 millones de niños habían sido infectados en Gran Bretaña, con más de 3 millones de casos infantiles desde el final de todas las medidas de seguridad de COVID el 19 de julio de 2021. Esta política encontró la oposición más decidida de educadores y padres y podría solo se implementará gracias al respaldo brindado a los Tories por Labor y los sindicatos de educación. Starmer declaró infamemente en agosto de 2020: “No solo quiero que todos los niños regresen a la escuela el próximo mes, espero que regresen a la escuela. Sin condiciones, sin peros, sin equívocos”. El Sindicato Nacional de Educación declaró que no podía haber “interrupción educativa”. Para enero de 2021, con millones de padres que se negaban a enviar a sus hijos a escuelas infestadas de COVID y los maestros retiraban su trabajo citando la Sección 44 de la Ley de derechos laborales en el lugar de trabajo, el gobierno se vio obligado a imponer otro cierre. Pero una vez más, el gobierno podría confiar en los sindicatos para reabrir las escuelas prematuramente a partir de marzo de 2021.

21. El Partido Laborista y los sindicatos están tratando de garantizar que los culpables de crímenes atroces estén protegidos, a través de su respaldo a la Investigación Covid-19 del gobierno conservador del Reino Unido. Al igual que con todas las investigaciones públicas 'independientes' organizadas por la élite gobernante, incluida la investigación en curso sobre el incendio de Grenfell, nunca se puede hacer justicia. Se lleva a cabo bajo la Ley de Investigaciones de 2005 del gobierno laborista de Blair, que garantiza que, independientemente de las pruebas que se presenten, los culpables estarán protegidos de responsabilidad civil o penal. Los familiares tienen prohibido prestar declaración en las audiencias públicas que comenzarán en 2023. Solo pueden presentar “retratos a pluma” para que otros los lean.

El programa del Comité Internacional de la Cuarta Internacional

22. El Comité Internacional de la Cuarta Internacional basa sus políticas en el reconocimiento de que la clase trabajadora internacional es la única fuerza social que puede oponerse con éxito a la política de infección, enfermedad y muerte masiva de la clase dominante e implementar un programa científico para poner fin a la pandemia a nivel mundial en interés de la humanidad. El historial del CICI está detallado en la resolución del Congreso de la PSI (EE.UU.).

23. El 20 de agosto de 2021, el WSWS publicó una declaración crítica que explica claramente las distinciones científicas y políticas entre las tres estrategias frente a la pandemia: inmunidad colectiva, mitigación y eliminación-erradicación. Su significado central fue la aclaración del carácter reformista de la estrategia mitigadora y la necesidad de que los trabajadores y científicos adoptaran la estrategia revolucionaria de eliminación-erradicación, resumida en este pasaje:

La mitigación es a la epidemiología lo que el reformismo es a la política capitalista. Así como el reformista alberga la esperanza de que las reformas graduales y fragmentarias, con el tiempo, disminuirán y mejorarán los males del sistema de ganancias, los mitigadores alimentan la ilusión de que el COVID-19 eventualmente se convertirá en algo no más dañino que el resfriado común. Esta es una quimera totalmente divorciada de la ciencia de la pandemia.

En realidad, mientras el virus se propague, seguirá mutando en nuevas variantes más infecciosas, letales y resistentes a las vacunas que amenazan a toda la humanidad. A menos que se erradique a escala mundial, las brasas de la COVID-19 seguirán ardiendo y creando las condiciones para que el virus estalle de nuevo.

24. El 22 de agosto y el 24 de octubre de 2021, el WSWS y la International Workers Alliance of Rank-and-File Committees, IWA-RFC (Alianza Internacional Obrera de Comités de Base, AIO-CB) organizaron dos poderosos seminarios web sobre la pandemia, con algunos de los principales científicos y trabajadores que luchan por el mundo. eliminación de COVID-19, que fueron vistos por miles de personas en más de 100 países mnidialmente. A lo largo de este período, la AIO-CB se expandió para incluiré una amplia gama de industrias a nivel internacional y ayudó a organizar una serie de huelgas escolares globales iniciadas por la madre británica Lisa Díaz.

25. Con el COVID arrasando las escuelas y #SchoolStrike2021—el hashtag principal para el evento que es tendencia en línea—los padres, educadores y estudiantes realizaron su primera huelga escolar el 1 de octubre. Resumiendo la importancia del evento global el presidente del Consejo Editorial Internacional del World Socialist Web Site, David North, declaró:

El 1 de octubre de 2021 es una fecha que vivirá en la historia. Los miles de trabajadores que respondieron al llamado a la acción de Lisa Diaz y se unieron a la Línea de Piquete Global en Línea de hoy están actuando en nombre de innumerables millones en todo el mundo.

Mientras que los gobiernos y los ricos solo están preocupados por el impacto de la pandemia en los mercados de valores y las ganancias corporativas, la clase trabajadora está preocupada por el costo de la vida humana. No se puede vivir con el COVID-19. Debe ser erradicado.

La acción de hoy es un gran paso adelante en la lucha contra la pandemia. Pero es el principio, no el final, de la lucha. Debemos construir sobre el logro de hoy y aumentar nuestros esfuerzos para movilizar a la clase trabajadora a escala mundial en acción.

26. La intersección de la lucha del CICI con sectores crecientes de la clase trabajadora provocó intentos de separar al CICI de los científicos, incluso a través de ataques a nuestra posición en la campaña #MeToo (#YoTambien), pero desde entonces solo hemos profundizado nuestras conexiones con los científicos con más principios. El CICI inició la Investigación mundial de los trabajadores sobre la pandemia de COVID-19 el 21 de noviembre de 2021. Esto fue solo cuatro días antes de que se conociera la noticia de la variante ómicron. Al anunciar la investigación, una declaración del WSWS señaló:

La pandemia es un evento de magnitud histórica. Su impacto en el curso del siglo XXI bien puede resultar tan trascendental como el de las dos guerras mundiales en el siglo XX. Por lo tanto, los orígenes, las causas y las consecuencias de la pandemia deben investigarse y comprenderse a fondo. Este desastre no fue un “acto de Dios” ni el resultado de una conspiración malévola en un laboratorio chino. Ha llegado el momento de refutar contundentemente las mentiras en las que los gobiernos y los medios corporativos han envuelto la narrativa de la pandemia.

Esta Investigación es necesaria para romper el encubrimiento, las falsificaciones y la desinformación que se han desplegado para justificar las políticas responsables de las muertes evitables de millones desde la detección inicial del SARS-CoV-2. La Investigación reunirá y pondrá a disposición del público la amplia evidencia de indiferencia socialmente maligna e incluso criminal hacia la vida humana.

27. La Investigación ha recibido testimonios vitales y presentará sus conclusiones iniciales a finales de este año. Entre los que testifican se encuentran científicos y activistas anti-COVID sobre temas que incluyen la estrategia cero-COVID en China, transmisión aérea, políticas de enmascaramiento, COVID prolongado, el papel de las escuelas en la transmisión viral y el impacto de COVID-19 en los niños. Los expertos han testificado sobre las políticas criminales de gobiernos y corporaciones en EE. UU., Canadá, Brasil, Suecia, Alemania, Australia, Nueva Zelanda, Sri Lanka e India. Trabajadores de una variedad de industrias, incluidos trabajadores automotrices, educadores, trabajadores de la salud y músicos, han testificado sobre sus experiencias. En Gran Bretaña, la investigación ha tomado el testimonio de varios padres, incluida Sarah Paxman, que están siendo perseguidos por las autoridades por negarse a enviar a sus hijos a escuelas que no cuentan con medidas de mitigación. A esta política particularmente perversa de la burguesía británica sólo se ha opuesto el Educators Rank-and-File Committee, -- Comité de Base de los Educadores-- iniciado por el PSI.

Las tareas del Partido Socialista por la Igualdad en la lucha contra la pandemia

28. Las dos alternativas que se le presentan a la humanidad son la infección masiva, el debilitamiento y la muerte sin fin, o el derrocamiento revolucionario del capitalismo y la implementación de una política de eliminación global, para poner fin a toda transmisión de persona a persona de COVID-19. La estrategia de eliminación, por la que lucha únicamente el CICI, requiere el despliegue universal de todas las armas del arsenal de medidas para combatir el virus. Esto incluye vacunación masiva disponible para todos, pruebas universales, aislamiento y rastreo de contactos, junto con el cierre temporal de escuelas y producción no esencial, con ingresos completos para los trabajadores y apoyo a las pequeñas empresas. En China, el despliegue de una estrategia de eliminación cero-COVID, respaldada por el apoyo popular, ha permitido a las autoridades suprimir brotes en repetidas ocasiones. Demuestra en la práctica que la eliminación es posible y que debe expandirse a nivel mundial.

29. La respuesta socialista revolucionaria a la pandemia de COVID-19, otras enfermedades infecciosas y el cambio climático tendrá éxito en la medida en que esté ligada a la construcción de un movimiento de masas de la clase obrera internacional que luche por el socialismo mundial. El PSI se compromete a luchar por las siguientes demandas:

a) La lucha por la eliminación global. La lucha por el fin de la pandemia requiere de la organización y coordinación de las luchas de la clase obrera a escala mundial, que solo se desarrollará a través de la construcción de la AIO-CB. Un objetivo central del PSI (Reino Unido) para fomentar el crecimiento de la AIO-CB debe ser popularizar la estrategia de eliminación global. El partido también debe desarrollar nuestra correspondencia y colaboración con los científicos y activistas anti-COVID con más principios que están de acuerdo y están luchando por la estrategia de eliminación global.

b) La expansión de la Investigación Obrera Global. Tal Investigación es un mecanismo poderoso para educar políticamente a los trabajadores sobre lo ocurrido durante la pandemia y quiénes son los responsables de este monumental crimen social. El PSI debe profundizar la investigación, con énfasis en sacar a la luz las experiencias de los trabajadores de todas las industrias.

c) La lucha por la sanidad pública socialista y la internacionalización de la industria farmacéutica y sanitaria. Durante la pandemia, ha habido una profundización cualitativa del asalto de décadas a la salud pública y la industria del cuidado de la salud. Las industrias del cuidado de la salud y farmacéutica deben estar bajo control público y global, para asegurar la distribución equitativa del tratamiento y los recursos que salvan vidas. El acceso, la investigación y el tratamiento deben ser globalizados, ya que estos son derechos universales en una sociedad moderna. Solo a través de la construcción de una sociedad socialista mundial se puede desarrollar la salud pública y la atención médica, que se encuentran entre los campos más críticos de la actividad humana. Bajo el socialismo, habrá una profunda expansión de la esperanza de vida y la calidad de vida de cada persona en el planeta.

(Publicado originalmente en inglés el 15 de noviembre de 2022)