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Queridos hermanos y hermanas,
La dirección del United Auto Workers (UAW) está tratando de acelerar la votación sobre sus acuerdos con los Tres Grandes fabricantes de automóviles que determinarán nuestro destino durante los próximos cuatro años y medio y más allá. Se ha lanzado una campaña de propaganda masiva y coordinada, en la que los ejecutivos del UAW, el presidente Biden, los medios corporativos y los patrones automotrices se unieron para decirnos que estos son contratos “históricos” que debemos respaldar.
Sin embargo, un examen de los detalles de los acuerdos revela que el presidente del UAW, Shawn Fain, y el resto de la burocracia del UAW nos han traicionado por completo. Además de abandonar nuestras demandas principales, los acuerdos darán a las corporaciones lo más importante que buscan: mano libre para diezmar empleos en su transición a la producción de vehículos eléctricos.
Esta es la razón por la que la Red de Comités de Base de los Trabajadores Automotores pide un voto por el “no” y que este acuerdo traicionero sea rechazado abrumadoramente.
Si bien existen algunas diferencias en cada contrato, los elementos principales son similares.
• SALARIOS: El aumento salarial del 25 por ciento está muy por debajo del 40-46 por ciento por el que Fain dijo que estaba luchando. Apenas compensará el aumento del 22 por ciento en los precios al consumidor que hemos sufrido desde el último contrato. Al final del contrato en 2028, el salario máximo será de alrededor de $40 la hora, ¡menos de lo que ganaron los trabajadores en 2007 en dólares ajustados a la inflación!
• COLA: El UAW aceptó la fórmula COLA inferior que tenía en 2009, que no se mantiene al ritmo del aumento real de la inflación. Para empeorar las cosas, la empresa recuperará hasta $0.10 la hora por cada ajuste trimestral del COLA que obtengamos, supuestamente para pagar mayores costes sanitarios. Ya vivimos de cheque en cheque debido al aumento récord en el costo de las necesidades básicas, además de tasas de interés más altas para las deudas de automóviles, viviendas, tarjetas de crédito y préstamos estudiantiles. ¡Necesitamos COLA completo y sin reembolsos!
• NIVELES: Exigimos la abolición de los niveles, y lo dijimos en serio. Pero el acuerdo permite que continúe el odiado sistema de niveles, y sólo acorta el período de “progresión” de ocho a tres años. Esto llevará más tiempo si se despide a los trabajadores. Además, ¿qué pasó con nuestra demanda de restablecer las pensiones pagadas por las empresas y los beneficios de salud para los jubilados, a las que el UAW abandonó en 2009?
• TEMPS: Fain afirma que “la era de los trabajos permanentes ha terminado”. De hecho, el UAW ha aceptado su continuación. En GM y Ford, sólo los trabajadores “temporales a tiempo completo”, no los “temporales a tiempo parcial”, se renuevan después de 90 días. En GM, no hay ningún lenguaje sobre la renovación de los trabajadores temporales a tiempo parcial. En el acuerdo UAW-Stellantis, sólo 1.957 trabajadores temporales actuales están siendo renovados. Si bien el UAW afirma que todos los trabajadores temporales se renovarán después de nueve meses de “servicio continuo”, los contratos de Stellantis y GM establecen que las empresas pueden extender el período con la aprobación del UAW.
Con los salarios iniciales para los nuevos trabajadores temporales congelados en $21 hasta 2028, todas las empresas tienen un incentivo financiero para despedir a los trabajadores antes de que lleguen a la fecha de renovación de nueve meses y contratar nuevos trabajadores temporales para mano de obra más barata. Ya hay cambios de turno en las obras del Complejo de Ensamblajes de Toledo que podrían dejar sin trabajo a la mayoría de los TPT.
• DESPIDOS Y CIERRES DE PLANTAS: Los ejecutivos de las empresas Ford, GM y Stellantis planean compensar cualquier aumento salarial destruyendo decenas de miles de puestos de trabajo durante la transición a los vehículos eléctricos. Planean deshacerse de los trabajadores mejor pagados con adquisiciones “voluntarias”, que van desde $47,000 10 a 14 años hasta $72,000 por 25 años y más.
Oculta en el contrato UAW-Ford hay una carta que declara que los trabajadores del Complejo Rouge serán considerados “excedentes” y se les ofrecerá transferencias a otras plantas, incluida una planta de baterías en Tennessee que aún no ha abierto y está a cientos de millas de distancia. Stellantis cerrará 19 instalaciones, incluida la planta de transmisión Tipton en Indiana y 10 centros de distribución de repuestos Mopar. Fain dice que el UAW “salvó” la planta de Belvidere, pero que las nuevas plantas de baterías y ensamblaje de vehículos eléctricos no están programadas para abrir hasta 2027-28. Los nuevos trabajadores en la planta de baterías recibirán un salario de 26 dólares la hora.
Con el cierre de tantas instalaciones, es prácticamente seguro que muchos trabajadores se verán obligados a elegir entre trasladarse a otros sitios a cientos de kilómetros de distancia, aceptar alguna forma de compra o simplemente tener que renunciar e intentar encontrar empleo en otro lugar, lo que conducirá a perturbaciones y precariedad económica para miles de trabajadores y sus familias.
Detrás de escena, los patrones automotrices y sus inversionistas de Wall Street están celebrando su victoria histórica. Los nuevos contratos solo le costarán a cada empresa mil millones de dólares en costos adicionales cada año, ¡una pequeña fracción de los $500 mil millones en ingresos que obtuvieron solo en 2022! Desde 2009, las tres empresas han obtenido casi $350.000 millones de dólares en beneficios y han aumentado considerablemente los salarios de los ejecutivos y los pagos a los accionistas adinerados. Anticipándose a una nueva ganancia inesperada, S&P Global mejoró la calificación crediticia de Ford a grado de inversión la semana pasada después de cuatro años de mantener a la empresa con una calificación de “basura”.
Los trabajadores nunca se recuperarán de la caída del 30 por ciento en los salarios reales que perdieron durante las últimas dos décadas. Durante años, el UAW ha ayudado a las empresas a mantener nuestros aumentos salariales por debajo de la tasa de inflación, e incluso por debajo de la de otros trabajadores del sector privado. Ahora el UAW nos dice que deberíamos celebrar porque hemos recuperado algunos dólares. ¡Esto es como decirle a un hombre que se está ahogando que se alegre porque ya no está tirado en el fondo del lago!
El aparato del UAW está elogiando estos acuerdos porque permitirán que el ejército de burócratas bien pagados cobre cuotas a los trabajadores mal pagados en las plantas de baterías para vehículos eléctricos y obtenga más puestos en el creciente número de comités “conjuntos de trabajadores y empresas” que se amplían en los contratos. Más burócratas del UAW podrán permanecer fuera de la sala y aumentar sus ya inflados salarios mientras hacen cumplir las demandas de la gerencia de concesiones locales, recortes de empleos y otras reducciones de costos para “mejorar la competitividad”.
Aunque Fain afirma que los miembros del UAW “son la máxima autoridad del sindicato”, sus hechos demuestran lo contrario. Los trabajadores votaron por un 97 por ciento a favor de una huelga total el 15 de septiembre, no de una “huelga de pie” ineficaz que ejercería más presión sobre los trabajadores que sobre las empresas. Estas huelgas fueron clausuradas antes de que los trabajadores vieran los acuerdos provisionales, y mucho menos los votaran. En varias localidades, la votación se ha programado incluso antes de que se celebren “reuniones informativas”.
Fain dice que los trabajadores tienen derecho a “discutir y debatir” los contratos para poder “tomar una decisión informada”. Si ese es el caso, los trabajadores deben tener una semana completa entre las reuniones informativas y la votación de ratificación para revisar los cientos de páginas de documentos e intercambiar información entre ellos.
Existe una enorme oposición a estos contratos de traición. Pero esta oposición debe organizarse mediante la expansión de comités de base, que transferirán el poder y la toma de decisiones del aparato del UAW a los trabajadores en las fábricas.
La Red de Comités de Base de Trabajadores Automotores insta a los trabajadores a realizar las siguientes acciones:
• Intercambiar información entre sí sobre las cláusulas ocultas del contrato, incluidos los recortes de empleo, la continuación del trabajo temporal, cambios punitivos en la política de asistencia y otras áreas.
• En las próximas “reuniones informativas” los trabajadores deben exigir el derecho a hablar y obtener respuestas a todas sus preguntas.
• Los trabajadores deberían proponer y votar una resolución exigiendo una semana adicional para revisar y discutir los contratos.
• En las reuniones deberían elegirse comités de trabajadores de confianza para supervisar el proceso de ratificación y evitar cualquier manipulación de los votos.
• También deberían proponerse y aprobarse resoluciones que declaren que la derrota del contrato en cualquiera de los fabricantes de automóviles resultará en una huelga total inmediata de los 146.000 trabajadores de GM, Ford y Stellantis.
Fain afirma que “se ha exprimido hasta el último centavo” de las empresas con su fraude de una “huelga de pie”, que obligó a dos tercios de los miembros del UAW a permanecer en el trabajo obteniendo ganancias para las compañías automotrices. ¿Qué sería posible si se movilizara todo el poder de los trabajadores automotores para luchar? Para hacer realidad este poder, deben ampliarse los nuevos centros de poder en las fábricas, los comités de base.
firmado,
Comité de Base de GM Flint
Comité de Base de Warren Truck
Comité de Base del Jeep de Toledo
Comité de Base de Trabajadores de GM Lansing
Comité de Base de Trabajadores de Ford Rouge
(Artículo publicado originalmente en inglés el 6 de noviembre de 2023)